Cómo leer su piel y comprender su impacto en la salud

Por la Dra. Molly Casey

Cómo leer su piel y comprender su impacto en la salud

Hay tantos temas de salud y bienestar para repasar. A menudo puede parecer que la lista es interminable, especialmente con los temas obvios: control del peso, presión arterial, niveles de colesterol y salud cardíaca. Luego, algunos lo profundizan un poco más con la salud de la tiroides, el hígado, la vesícula biliar y las suprarrenales. Muy rara vez veo a personas comprometidas con el órgano más grande del cuerpo y el papel que desempeña en su salud, la piel. Hoy, echemos un vistazo.

Anatomía

La piel consta de dos capas principales, la epidermis, que es una capa externa más delgada y la dermis, una capa interna más gruesa. La piel tiene tres funciones principales: protección, regulación y sensación.

Algunos datos divertidos:

  • La piel de un cuerpo cubre 21 pies cuadrados y pesa nueve libras.
  • Hay aproximadamente 11 millas de vasos sanguíneos en la piel.
  • La piel es más gruesa en los pies y más fina en los párpados.
  • Se renueva cada 28 días.
  • Se comunica con el cerebro a través de receptores que reciben estímulos del mundo exterior y se comunica a través de los nervios con el cerebro para que pueda procesar y dirigir una respuesta.
  • Existen al menos cinco tipos diferentes de receptores para el dolor y el tacto, pero algunos viajan a velocidades más rápidas (calor y dolor)
  • Los cambios en la piel pueden indicar cambios en la salud.

Proteccion – La piel actúa como barrera de protección del mundo exterior. No solo protege contra fuerzas mecánicas o caídas, temperaturas frías y calientes, rayos solares, organismos: virus, bacterias, radiación y otros productos químicos. La piel es tu primera línea de defensa e inmunidad.

Regulación – La piel también regula la temperatura corporal. Lo hace a través del mecanismo de la sudoración, la presencia o falta de cabello, la circulación periférica e incluso en la composición fluida o el equilibrio del sudor. Incluyo la desintoxicación en la categoría de regulación. La piel es su mayor órgano de desintoxicación y es porosa; a través de esos poros y el sudor, el cuerpo libera desechos y sustancias químicas que ya no sirven a su cuerpo.

Sensación – La piel alberga todo tipo de terminaciones nerviosas, células y receptores. Estos ayudan a su cuerpo a comunicarse con el cerebro. Detectan y transportan información sobre todo tipo de cambios en el medio ambiente, dentro y alrededor del cuerpo.

Tu piel

Tu piel es una ventana a tu salud. No es la única ventana, pero es una ventana que ofrece protección, regulación, desintoxicación y comunicación con su cerebro; es una interfaz. Cuando la piel aparece en una determinada condición, puede estar afectando su salud en general. Por ejemplo, las erupciones pueden ser indicativas de enfermedades autoinmunes o problemas hepáticos. Los cambios comúnmente conocidos en pecas o lunares pueden ser indicativos de tipos de cáncer de piel. Los cambios de dureza o sequedad de la piel pueden indicar problemas con la presión arterial o problemas renales. Ciertamente, esta no es una lista detallada, pero la salud de su piel es importante. Al prestar atención, puede ver más de lo que cree.

Cuidando tu piel

Tu piel está llena de terminaciones nerviosas, células y receptores. La piel juega un papel importante en su comunicación con el medio ambiente. Asegurarse de que su sistema nervioso funcione y se comunique lo mejor posible es un gran comienzo para darle a su piel lo que necesita para estar lo más saludable posible.

Otro hábito saludable para el cuidado de la piel es beber la mitad de su peso corporal en onzas de agua limpia. Cada célula de tu cuerpo necesita agua. Cuanto mejor hidratado esté su cuerpo, mejor podrá hacer su trabajo de desintoxicación la piel. La deshidratación crónica inhibirá la capacidad de la piel para hacer su trabajo.

Tenga en cuenta los productos químicos que se aplica a la piel. Es poroso y se absorbe de afuera hacia adentro, lo opuesto a sudar (escribiré más sobre esto en un artículo por venir).

Por último, preste atención y observe su piel con regularidad. No puedes ver tu corazón. Puedes ver tu piel. Sepa cómo se ve normalmente su piel y revísela con regularidad. Si nota diferencias que cuestiona, o nota algo alarmante, hágalas revisar; ¡recuerde que es una ventana a su salud!