Radiografías de columna vertebral

Radiografías de columna vertebral

Radiografía de la columna vertebral etiquetada

Las radiografías de la columna vertebral son imágenes de la misma. Pueden tomarse para detectar lesiones o enfermedades que afectan a los discos o las articulaciones de la columna vertebral. Estos problemas pueden incluir fracturas de la columna, infecciones, dislocaciones, tumores, espolones óseos o enfermedades discales.
Tendrá que quitarse cualquier joya que pueda estorbar en la radiografía. Es posible que tenga que quitarse algo de ropa, dependiendo de la zona que se examine. Se le entregará una bata de tela o de papel para que la utilice durante la prueba. Es posible que se le permita conservar su ropa interior si no estorba en la prueba.
Durante la prueba de rayos X, se acostará en una mesa de rayos X. Si la radiografía se realiza por una posible lesión grave en el cuello o la espalda, un radiólogo mirará las primeras radiografías antes de tomar otras. Esto se hace para evitar causar más lesiones. Si tiene puesto un collarín cervical, es posible que se tomen radiografías y se haga un examen físico para ver si se puede quitar el collarín sin dañar la columna vertebral.
Una radiografía de la columna vertebral suele durar unos 15 minutos. Tendrá que esperar unos 5 minutos hasta que se procesen las radiografías por si es necesario tomar más imágenes. En algunas clínicas y hospitales, las radiografías pueden mostrarse de inmediato en una pantalla de ordenador.

Radiografías de la columna vertebral

Las radiografías de la columna vertebral proporcionan imágenes detalladas de los huesos de la columna, y pueden tomarse por separado para las tres partes principales de la columna. Las afecciones que pueden aparecer en las radiografías de la columna vertebral incluyen fracturas, tumores y artritis.
Una radiografía es una prueba que utiliza la radiación para producir imágenes de los huesos y órganos del cuerpo. Las radiografías de la columna vertebral proporcionan imágenes detalladas de los huesos de la columna vertebral, y pueden tomarse por separado para las 3 partes principales de la columna vertebral: cervical (cuello), torácica (espalda media) y lumbar (espalda baja).
Las radiografías funcionan porque los tejidos del cuerpo varían en densidad (grosor). Cada tejido deja pasar una cantidad diferente de radiación y expone la película sensible a los rayos X. Los huesos, por ejemplo, son muy densos y la mayor parte de la radiación no puede atravesar la película. En consecuencia, los huesos aparecen de color blanco en la radiografía. Los tejidos menos densos, como los pulmones, que están llenos de aire, permiten que una mayor parte de los rayos X pasen a la película y aparezcan en la imagen en tonos grises.

Radiografía de la columna vertebral sana

Tessa Davis. Radiografías de columna toracolumbar, No olvides las burbujas, 2019. Disponible en: https://doi.org/10.31440/DFTB.17581Read nuestra guía paso a paso para interpretar las radiografías de columna torácica y lumbar.
Solo en las radiografías, el 25% de las fracturas por estallido se diagnostican erróneamente como fracturas por compresión vertebral. Una fractura por estallido es aquella en la que hay una compresión, pero parte del cuerpo vertebral se ha proyectado hacia fuera en sentido anterior.
Se llama así porque suele producirse cuando la gente salta por la ventana para escapar de la policía o de parejas enfadadas. Se trata de una carga axial severa que da lugar a fracturas por compresión/explosión junto a una fractura de calcáneo.
Si te ha gustado este post, por qué no echas un vistazo a nuestros cursos online en DFTB DigitalAcerca de Tessa DavisTessa Davis es consultora en Medicina de Emergencia Pediátrica en el Royal London Hospital y profesora titular en la Queen Mary University of London.Ver todos los posts de Tessa Davis | Website

Anatomía radiológica de la columna vertebral ppt

Se seleccionó aleatoriamente una cohorte de 321 hombres de entre dieciocho y cincuenta y cinco años de un grupo de 1221 hombres que habían sido encuestados mediante un cuestionario. A continuación se les realizaron radiografías de la columna lumbar. De los 292 sujetos que cumplían los criterios de inclusión en el estudio, noventa y seis (32,9%) no habían tenido nunca dolor lumbar, 134 (45,9%) habían tenido o tenían un dolor lumbar moderado, y sesenta y dos (21,2%) habían tenido o tenían un dolor lumbar intenso. En los tres grupos había una frecuencia similar de vértebras de transición, nódulos de Schmorl, signo de vacío discal, estrechamiento del espacio discal entre la tercera y la cuarta vértebra lumbar y la quinta vértebra lumbar y la primera sacra, y espolones en garra. Cuando había espolones de tracción o estrechamiento del espacio discal, o ambos, entre la cuarta y la quinta vértebras lumbares, era evidente una mayor incidencia de dolor lumbar grave. También hubo una asociación significativa de estos dos hallazgos radiográficos con los síntomas (dolor, debilidad y entumecimiento) en las extremidades inferiores. La lordosis lumbar medida, la longitud de la apófisis transversa de la cuarta vértebra lumbar y la relación entre el cuarto y el quinto cuerpo vertebral lumbar con referencia a la línea intercristalina no tenían ninguna asociación con el dolor lumbar. El aumento de la lordosis lumbar tenía una asociación significativa con la disminución de la altura del espacio discal y la deformidad en cuña del disco entre la cuarta y la quinta vértebra lumbar. (RESUMEN TRUNCADO EN 250 PALABRAS)