Discos l4-l5 de la columna vertebral
Ejercicios para el tratamiento de la hernia discal l4-l5
Vemos a muchos pacientes que se quejan de dolor lumbar y rigidez en músculos como la cadera, los cuádriceps, los glúteos y los isquiotibiales sin darse cuenta de que pueden tener una hernia discal en la columna lumbar.
Literalmente, una hernia discal se produce cuando el núcleo pulposo de un disco migra hacia fuera a través de la fibrosis anular hacia la parte exterior de un disco vertebral. ¿Y eso qué significa? Imagínatelo de esta manera. Un disco es como un donut de gelatina, está formado por 2 partes. El centro es la gelatina (núcleo pulposo) y se supone que debe permanecer en el centro. Está rodeado por el donut (anillo fibroso). A diferencia de un donut, no hay ningún agujero en el disco para inyectar la gelatina, por lo que realmente no hay puntos débiles para que la gelatina salga. Observe la siguiente imagen y verá una sección transversal de un disco intervertebral normal y de un disco herniado.
Hay muchas formas diferentes en las que un disco intervertebral puede herniarse. Lesiones deportivas, resbalones y caídas, accidentes de coche (MVA) o incluso un desgaste anormal. Si el cuerpo está desalineado y un lado roza más que el otro, puede llevar a que un área se debilite y eso puede causar que un disco se hernie. En The Spine and Health Center, vemos muchas personas con malas posturas que han sufrido hernias discales. Las lesiones por estrés repetitivo, los síndromes por uso excesivo y un montón de otros problemas también pueden causar hernias de disco intervertebrales, pero creo que usted entiende el punto.
Imagen de la protuberancia discal l4-l5
La espondilolisis y la espondilolistesis son enfermedades que afectan a las articulaciones facetarias que alinean las vértebras una encima de otra. La espondilolisis es una debilidad o fractura por estrés en la zona de la articulación facetaria. Esta debilidad puede hacer que los huesos se desplacen hacia delante fuera de su posición normal, lo que se denomina espondilolistesis, y que los nervios de la columna se retuerzan. Las opciones de tratamiento incluyen la fisioterapia para fortalecer los músculos. Se puede utilizar un corsé para apoyar la columna vertebral. En algunos casos, la cirugía puede realinear y fusionar los huesos.
La columna vertebral está formada por 24 huesos móviles, llamados vértebras, que proporcionan el soporte principal del cuerpo y le permiten doblarse y girar. Cada una de las vértebras está separada y amortiguada por un disco de gelatina que impide que se rocen. Las vértebras están conectadas y sujetas entre sí por ligamentos y articulaciones, denominadas articulaciones facetarias (véase Anatomía de la columna vertebral).
La articulación facetaria superior y la inferior están conectadas por un estrecho puente óseo llamado pars interarticularis (Fig. 1). La faceta inferior de una vértebra encaja perfectamente en la faceta superior de la que está por debajo -superponiéndose como tejas-, empezando por la vértebra de la base del cráneo y terminando en el coxis.
Síntomas de estenosis espinal severa l4-l5
ResumenLas hernias discales laterales constituyen el 7-12% de todas las hernias discales. Pueden ser puramente laterales o extraforaminales, situadas más allá de los pedículos, o pueden incluir componentes intraforaminales e incluso intracanaliculares. Se producen predominantemente en los niveles L4-L5 y L3-L4 en un número casi igual, aunque ocasionalmente se observan en L5-S1. Los síndromes clínicos reflejan la compresión de la raíz nerviosa y el ganglio de salida superior; es decir, un disco muy lateral de L4-L5 produce un síndrome radicular de L4. Las quejas clínicas suelen incluir dolor radicular intenso acompañado de signos mecánicos muy positivos; maniobras de Laségue y de Laségue inverso (prueba de estiramiento femoral). Se observan déficits neurológicos, incluyendo hallazgos motores, reflejos y sensoriales, en más del 75% de los casos. Aunque el tratamiento conservador es ocasionalmente exitoso (10%), la cirugía suele ser necesaria. La extensión de la estenosis y los cambios degenerativos que la acompañan determinan si es necesario realizar una laminectomía, una hemilaminectomía o una laminotomía, junto con una de las diversas opciones de resección facetaria: facetectomía completa, enfoque intertransversal, facetectomía medial o un procedimiento lateral extremo. En el postoperatorio, los resultados neurológicos de los pacientes, basados tanto en las medidas de resultados del cirujano como en las del paciente (SF-36), fueron comparables para los diferentes procedimientos quirúrgicos que se habían basado en la patología individual del paciente.
Tratamiento de la hernia discal l4-l5
La hernia discal espinal es una lesión del tejido amortiguador y conectivo entre las vértebras, normalmente causada por un esfuerzo excesivo o un traumatismo en la columna vertebral. Puede provocar dolor de espalda, dolor o sensibilidad en diferentes partes del cuerpo y discapacidad física. La herramienta de diagnóstico más concluyente para la hernia discal es la resonancia magnética, y el tratamiento puede ir desde los analgésicos hasta la cirugía. La mejor forma de protegerse de la hernia discal es mediante la fuerza del núcleo y el conocimiento de la mecánica corporal, incluida la postura [cita médica necesaria].
La hernia discal se asocia con frecuencia a la degeneración del anillo externo, conocido como anillo fibroso, relacionada con la edad, pero normalmente se desencadena por un traumatismo o un esfuerzo al levantar o girar el cuerpo[1] Los desgarros son casi siempre posterolaterales (en los lados posteriores) debido a la estrechez relativa del ligamento longitudinal posterior en relación con el ligamento longitudinal anterior[2] Un desgarro en el anillo discal puede dar lugar a la liberación de sustancias químicas que causan inflamación, lo que puede provocar un dolor intenso incluso en ausencia de compresión de la raíz nerviosa.